Conservar los momentos para que perduren para siempre. Un momento en el tiempo, donde recordemos el propósito que nos ha llevado hasta ahí y por lo que estamos dispuestos a luchar, disfrutar, reír, ensuciarnos y emocionarnos.
Por menos poses y más sentirlo. Más vivirlo. Eso es lo que me gusta de ser Fotógrafo de Familias e Historias de Amor.